Diseño Holístico, Diseño para la Felicidad
23 de septiembre de 2024¿Cómo afecta el Diseño de un espacio al bienestar y productividad?
23 de septiembre de 2024Tres consejos prácticos y sencillos para comenzar tu viaje hacia un estilo de vida más sostenible en tu hogar.
Porque vivir de manera sostenible no solo es beneficioso para la casa común que todos habitamos, sino que también crea un ambiente más saludable y armónico en tu propia casa.
Paso 1: No tiene que ser perfecto (De hecho, nada lo es)
La sostenibilidad no es una meta fácil de alcanzar y vivir de manera 100% sostenible puede ser un desafío cuando no una quimera. Como siempre, la conciencia y la voluntad de mejorar son los ingredientes clave y con preocuparte poco hacemos, menos aún con obsesionarnos. Lo sanívoramente importante, es tomar conciencia y actuar con coherencia y consciencia.
Paso 2: Reduce, Reduce y Reduce
Si bien este paso podría llamarse la regla de "las 3 erres": Reduce, reutiliza y recicla; bajo nuestra experiencia, lo que más ayuda y de lo que más avanza paso a paso en la buena dirección, es reducir, o lo que es lo mismo, comprender que muchas veces menos, es más. Porque efectivamente, tantas y tantas veces, ¡menos es más!
- Reduce compras innecesarias. Antes de comprar algo cuestiónate por qué y para qué quieres comprarlo, qué es lo que te aporta, si tienes espacio para ello y si puedes reemplazarlo por alguna alternativa sostenible o simplemente dejar de usarlo, entonces, renuncia a ello.
Si tras este análisis es necesario comprarlo, asegúrate de que así como entra algo nuevo, algo que ya no utilizas sale de casa, así evitarás la acumulación de cosas innecesarias que lo único que hacen es congestionar los espacios y la energía.
- Reduce la entrada de plásticos en tu hogar, comprando los productos de limpieza y cosmética en tiendas a granel, donde puedes rellenar de manera prolongada algún bote que ya tengas en casa. Las frutas, verduras y todo lo de carnicería y charcutería, en mercados locales donde puedes llevar tus propias bolsas y recipientes para que te pongan la cantidad justa que necesitas, detergentes y productos de limpieza incluidos. Lo mismo sucede a la hora de llevar comida de casa, muchas de las cosas que acostumbramos a envolver en papel de aluminio o film, podríamos llevarlas igual de bien conservadas en un tupper.
Reduce la entrada de tóxicos a tu hogar. Venimos del ejemplo de generaciones anteriores que, acostumbradas a utilizar un sinfín de productos tóxicos en la limpieza, no eran conscientes del daño innecesario que estos provocan en su salud y la de su familia. Afortunadamente, existen bastantes estudios que demuestran que el uso de este tipo de tóxicos no sólo afecta al ecosistema sino a nuestra propia salud, potencialmente provocando enfermedades respiratorias, alergias o incluso cáncer entre otros... Si lo piensas, en casa no generamos una suciedad industrial, en casa realmente es mucho más sencillo y no hacen falta tantos productos. Bajo nuestra experiencia, casi todo es posible limpiarlo con un jabón respetuoso como el jabón de Marsella, vinagre, bicarbonato y unas gotas de vodka o ginebra, para los cristales.
Aún así, obviamente, sigue siendo muy importante reutilizar los objetos y materiales en lugar de desecharlos, priorizar las compras de segunda mano y reciclar de manera correcta todos aquellos residuos que generamos
Paso 3: Toma decisiones conscientes a la hora de amueblar o decorar
Seguiremos comprando, lo que también es importante para mantener viva la economía, pero cuando estés considerando renovar o decorar tu hogar, tómate tu tiempo para elegir lo que es la mejor opción acorde a tus posibilidades.
Practica el ejercicio de tomar consciencia de la importancia que tienes como consumidor/a la hora de decidir qué tipo de productos quieres que se sigan produciendo y que tengan el éxito que merecen. En ocasiones tal vez tengas que ahorrar un poco más antes de comprarlo, pero en otras simplemente tomarás una mejor decisión de compra.
En este sentido, un producto nuevo, realizado con materiales de fuentes renovables, de KM 0, por artesanos locales y con un montón de certificados, a veces se puede escapar de nuestro presupuesto, pero no por ello debemos dejar de fijarnos en la importancia de los detalles y el alto valor que todo ello conlleva.
Por ejemplo, existen productos cuyas materias primas son recicladas y que no son especialmente caros, ese detalle ya es mejor que muchas otras opciones; comprar un producto local, simplemente por serlo, ya es mejor que otras opciones; una empresa aunque no sea local, cuyas materias primas tengan algún certificado ecológico, (como en el caso de las maderas certificadas por FSC, que garantizan que provienen de bosques donde se planta un árbol por cada árbol que se tala) es mejor opción que muchas otras. Recuerda que nada va a ser perfecto, pero sí, puede ser mejor.